lunes, 18 de noviembre de 2013

El Justo A Tiempo en el contexto Colombiano.





A partir de los años 60, durante décadas pasadas y hasta el presente los directivos de las  organizaciones en diferentes países al igual que en Colombia han realizado esfuerzos para incorporar en su gestión las llamadas tecnologías de gestión, y otras denominadas herramientas de gestión.

En esta primera década del siglo XXI, en la intención de aplicar las tecnologías o herramientas de gestión, las empresas colombianas cometen los  mismos errores de directivos o empresas de los años 70’s, 80’s y 90’s lo que trae como consecuencia intentos fallidos que con el tiempo son conocidos más muchos fracasos que los pocos éxitos en su aplicación.

Carlos Eduardo Méndez afirma: “no han existido cambios  cualitativos importantes al interior de las empresas.... su aplicación están lejos de contribuir a la innovación en la gestión, sus resultados de implantación no son significativos en la relación entre el número de empresas que inician el proceso y las que lo culminan con su  incorporación definitiva a la gerencia con resultados verificables que soporten la eficiencia de su aplicación. La deserción de las empresas que iniciaron el proceso es alta, no hay continuidad, no existe el interés ni la constancia necesaria en personas de la empresa para hacer de esta tecnología una característica de la administración.

El conocimiento que  las personas de la gran empresa y las PYMES tienen sobre las tecnologías o herramientas de gestión es insuficiente y disperso, se puede afirmar que la literatura sobre administración referida al Management divulgada en Colombia, es abundante y extensa. Tales publicaciones identifican y difunden lo que se conoce como las tecnologías y/o herramientas de gestión. Sin embargo, es tal el número y la variedad de las mismas que no todas las personas encuestadas  tienen conocimiento sobre todas. No existe un conocimiento total al respecto, pocas  entienden para cada tecnología y/o herramienta de gestión, sus objetivos, alcance, metodología de implantación, beneficios y dificultades de su aplicación. La poca lectura indica que el conocimiento se adquiere a través de terceros que podrán ser consultores externos, académicos, conferencistas u otros.

Las tecnologias o herramientas de gestión han tenido relativa acogida en Colombia. Algunas de ellas no han tenido el impacto suficiente para su aplicación, a pesar de que son mencionadas de forma insistente por libros, conferencistas, artículos en revistas especializadas, etc. Puede concluirse que el conocimiento, así como la incorporación de la tecnología y/o herramienta de gestión obedece a la perspectiva particular de los directivos de cada empresa a su interés gerencial así como a la fuente de conocimiento. Por otro lado, es paradójico que frente a la difusión en diversas fuentes, su aplicación alcance niveles significativos apenas entre ellas.

La alta gerencia (gerente general y de áreas) tienen un rol importante en la propuesta de aplicar la tecnología, además, está claro que una vez tomada la decisión, el asesor externo es más influyente que en la concepción de la idea para la implantación. La participación que tienen los estamentos de la empresa, a partir del momento que existe la idea de utilizar la tecnología o herramienta de gestión hasta su aplicación cambia. En la gran empresa la idea que tiene su origen en la gerencia general pasa en la implantación a los gerentes de área y grupos constituidos para tal fin. En las Pymes la gerencia general lidera el proceso que comparte en menor intensidad con los gerentes de área. Señala esta información la importancia que tiene el gerente general de las pymes en los procesos de implantación de las tecnologías de gestión. En las grandes empresas, la tiene el gerente de área y los comités establecidos para este fin. Un análisis de esta información señala claramente el papel del consultor externo en los procesos de cambio que resultan de la implantación de la tecnología o herramienta de gestión. En las pymes existe una mayor dependencia del consultor externo desde el inicio del proceso hasta su fase de evaluación y seguimiento. Tal dependencia se puede interpretar como la ausencia de una figura interna que asuma el rol de facilitador del proceso. Situación contraria se identifica en la gran empresa donde la dependencia es menor.  Es posible que al interior del área de gestión humana u otra de estas empresas existan condiciones para apoyar el proceso con personal interno especialmente en las fases de implantación y seguimiento.


-       LA CULTURA DE LA ORGANIZACIÓN CONDICIÓN DE CAMBIO

Para implantar las tecnologías de gestión la cultura de la organización que la adopta debe tener unos requerimientos mínimos necesarios que en el caso de las empresas colombianas no se dan. En estas, las características de un trabajo individual con un nivel alto de aislamiento es obstáculo para el trabajo en grupo. La subordinación de los empleados a la autoridad formal y a sus decisiones, afecta la iniciativa y creatividad. El estilo de liderazgo de carácter autocrático conduce a personas a obedecer por temor, sumisas y sin compromiso. Significa que las personas podrían compartir una cultura que los llevan a comportarse de manera individualistas, no saben trabajar en equipo, conformistas, no les interesa aprender en su trabajo, carecen de iniciativa y creatividad en la solución de los problemas que les afectan, así como de estima en el trabajo que realizan. Aceptan y manifiestan comportamientos de sumisión a la autoridad formal por la necesidad de un salario. Cuando la cultura de una organización se identifican este tipo de situaciones y comportamientos difícilmente una tecnología de gestión tendrá aceptación, en razón a que en sus propósitos y metodología de intervención, se requiere de personas que compartan una cultura personas con posibilidad de  aportar y trabajar en equipo, con una visión holística entendiendo la multiplicidad de relaciones que desde su cargo tiene con personas y áreas. Con habilidad de solucionar problemas de manera individual o en equipos de trabajo aportando para que estos sean de alto desempeño. Que entiendan el significado del proceso de cooperación en la dinámica de su trabajo con su jefe y otros compañeros. Con un alto nivel de responsabilidad y compromiso con la labor que desempeña. Alineado con la organización porque comparte sus objetivos, políticas y manera de actuar. Satisfecho con el clima organizacional que percibe porque contribuye a su desarrollo laboral y personal. Los anteriores y otros aspectos puede considerarse como requerimientos para que la organización y en las personas que la conforman construyan mediante la cultura las condiciones de cambio propicias que garanticen la implantación, continuidad e incorporación a la gestión de la organización estas tecnologías.

-       EL ROL DE LOS AGENTES DE CAMBIO

La necesidad de iniciar un proceso de cambio mediante la implantación de una tecnología o herramienta de gestión aparece como consecuencia de la iniciativa de los gerentes (general o de área), quienes buscan solución a problemas que se proyectan en la eficiencia operacional y sus resultados. Esta situación propicia la vinculación del gerente general o similar en rango a la fase de implantación. En las pymes, es el resultado de la iniciativa del dueño quien en calidad de gerente general propicia la aplicación de estas tecnologías o herramientas por motivos de productividad, crecimiento, proyección o por razones de carácter subjetivo. No se perciben formas similares en la forma como se vinculan los diferentes estamentos de la empresa en las fases del proceso de cambio. Significa que a pesar de la similitud que existe en la metodología de implantación que se identifica en la lectura de cada tecnología o herramienta de gestión, al llevarlo a la práctica en las empresas analizadas, hay diferencias significativas que determinan una participación fragmentada y parcial en el proceso. A partir de la atomización de tales procesos, las personas de la empresa pierden la visión integral del mismo, con los efectos que esta situación podrá tener en los resultados, además de la mayor resistencia de las personas al proceso mismo por no entenderlo en su dimensión total. La forma como los empleados de la gran empresa son receptivos, y se identifican con el proceso de la tecnología, influye en el nivel de compromiso que los encuestados perciben quienes lo califican bajo. Causa de ello es la participación atomizada que tienen las personas en las diferentes etapas del proceso, la calidad de la comunicación antes y durante el cambio, el aprendizaje del proceso en sí mismo, sus alcances, metodología, beneficios, inconvenientes.

En consecuencia no es suficiente la forma como se involucran los agentes de cambio para que en el caso de las tecnologías estas logren incorporarse a la organización.

-       El proceso de cambio en la aplicación de tecnologías de gestión


Se hace necesario iniciar con el concepto de cambio social propuesto por Rocher y entenderlo como “toda transformación observable en el tiempo que afecta, de una manera no efímera ni provisional, a la estructura o al funcionamiento de la organización de una colectividad dada y modifica el curso de su historia”.

De acuerdo con lo planteado por Guy Rocher el proceso de cambio implica la secuencia y encadenamiento de acciones que lo propician. La forma como se han asumido estos procesos de cambio en Colombia no ha sido desde una perspectiva planeada y rigurosa. No se cumplen con los lineamientos estipulados para el mismo que señalan la necesidad de definir dentro de una secuencia lógica que se inicia por la generación de la idea de implantación, el diagnóstico, la formulación de la estrategia, la organización de la estructura, la puesta en marcha del plan, la evaluación y control. Todo ello por el pragmatismo de directivos que buscan en las tecnologías de gestión solución inmediata y en el corto plazo a sus problemas de eficiencia.